Primera Falda

A veces viene bien parar. Dejar la rutina diaria. Tiempo para uno mismo. Tiempo para dedicarle a las cosas que realmente te gustan. Tiempo para pensar, para ver las cosas desde otra prespectiva. Para averiguar qué es lo que quieres. Para averiguar qué es lo que no te gusta, lo que deseas cambiar. y buscar la fuerza y el momento para cambiarlo. Dificil tarea, aunque no imposible (o eso me animo a pensar).
Y, a veces, sólo deseas evadirte. Dejar la mente en blanco. O mantenerte muy ocuparado. Cualquier cosa para alargar lo máximo posible el tan temido encuentro contigo mismo. Evitar tener que enfrentarte a la realidad. Posponer la toma de decisiones.
En cualquier caso, y por desgracia, este estado no puede ser permanente. Ya está el resto del mundo para recordártelo.
Yo sólo quiero que dure un poquito más...

Esta falda es la primera de varias que pienso hacer en este periodo "sabático" que me tomo.

- "Bueno, pero aparte del alcantarillado, la sanidad, la enseñanza, el vino, el orden público, la irrigación, las carreteras y los baños públicos, ¿qué han hecho los romanos por nosotros?
- Nos han dado la paz
- ¿La PAZ? Que te folle un pez”

“La Vida de Bryan”. Los Monty Python

el boceto de mi Manuela

Me he dado cuenta de que enseguida le cojo cariño a la gente. No a todo el mundo. Esto debo de puntualizarlo. En eso soy bastante selectiva. Me cuesta coger confianza con la gente y tardo en soltarme. Pero en cuanto noto que alguien vale la pena, me empiezo a sentir a gusto con esa persona y entonces lo doy todo. y me encariño.
Hay gente que opina que eso es muy peligroso, supongo que porque estás más expuesto a que te hagan daño. No lo sé. Pero prefiero correr ese riesgo. El vivir con miedo hace que te pierdas muchas cosas. Entre ellas, conocer buena gente.

"Están los xenonistas. Dicen que el mundo es básicamente complejo y aleatorio. Luego están los ibidianos. Dicen que el mundo es básicamente simple y obedece ciertas reglas fundamentales. Y luego está Didáctilos, que dice básicamente que el mundo es un lugar muy extraño. Y que no contiene suficiente bebida".

Terry Pratchett, "Dioses Menores" (1992).